El Huracán María destapó la realidad

         Los puertorriqueños estamos atrapados en nuestras propias contradicciones. ​El huracán María levantó los velos, el telón, para hacernos ver claramente esas contradicciones. Puerto Rico USA no existe, es un mito, es una mentira, es una ficción política colonial; somos un país latinoamericano y caribeño sujeto a un coloniaje tan feroz que, sino despertamos de la sedación a la que estamos sometidos nos convertiremos en uno de los países más pobres de la región, porque nuestras riquezas y el excedente económico producidos se marchan al exterior a cambio de fondos federales.
​Varios ejemplos nos pueden ayudar a entender la realidad objetiva y nuestra capacidad subjetiva para superarlos organizadamente como pueblo:

  1. Somos una nación donde la mayoría somos emigrantes; pero no importa donde estemos, tenemos una responsabilidad que cumplir con Puerto Rico.
  2. Estamos en un proceso de desindustrialización que nos conduce por otro lado a la dependencia, hemos acudido al capital financiero como forma de financiar obra pública.
  3. Vivimos en la autopista de los huracanes y muchas de nuestras casas son de madera y zinc, urge una nueva planificación urbana, doscientas mil casas de madera fueron derribadas por el huracán María.
  4. Baja producción y alto consumo a crédito mantiene la deuda privada alta, como tenemos la deuda pública.
  5. Nuestra economía y el Estado están dominados hoy por el capital financiero, como en el pasado lo estuvimos por el capital industrial (por ejemplo, manufactura, petroquímicas y las 936).
  6. No tenemos un plan de desarrollo económico sustentable que sustituya las transferencias de fondos federales, no podemos seguir postergando esta tarea.
  7. Luego de María tenemos que planificar programas de reforestación urgente, para mitigar daños ecológicos a mediano plazo, perdimos en algunas zonas hasta el 30% de los árboles.
  8. María nos enseñó que lo público (un Estado social que atienda las necesidades básicas) es necesario e imprescindible en una sociedad como la nuestra, el mercado no atiende necesidades sociales ni emergencias como la actual post María.
  9. Tenemos que fortalecer nuestro sistema público de enseñanza primaria y universitaria para construir un nuevo bloque de conocimientos científicos que nos permita analizar y comprender la realidad para transformarla, en época de crisis la universidad juega un papel fundamental y el sistema UPR ha sido neoliberalizado, endeudado.
  10. Tenemos que darle prioridad a nuestra infraestructura: eléctrica, agua, carreteras, aeropuertos, abolir leyes de cabotaje y mejorar el sistema público de transportación, imponer contribuciones a las plusvalías, a las contaminantes, y no a los salarios.
  11. La deuda pública es impagable, hay que auditarla (para ver cuánta de esa deuda es ilegítima), renegociar nuevos términos de repago (reestructurar la deuda) favorables al pueblo, y no a los intereses bancarios.  La Junta de Supervisión Fiscal (JSF) es un ente antidemocrático impuesto por encima de un gobierno electo, no la aceptamos, la repudiamos porque es una dictadura del capital financiero sobre Puerto Rico. Exigimos dadas las circunstancias de P.R. luego del paso de María, una moratoria en el pago de la deuda legítima y/o la cancelación de la deuda.
  12. La crisis tiene responsables en todas las esferas, públicas y privadas, funcionarios públicos, políticos rojos y azules, empresarios, bufetes de abogados, contratistas, economistas, corredores de la bolsa, banqueros, ex gobernadores y ex alcaldes. Tenemos que conocerlos con nombres y apellidos para impedirles ocupar puestos públicos y procesarlos criminalmente por saqueo de fondos públicos, quien se apropie de dineros públicos tiene que devolverlos.
  13. Darle apoyo e incentivos al capital nacional, al pequeño comerciante, a proyectos comunitarios, a la agricultura alternativa y a la tradicional, crear empleos públicos y privados, incentivar al pequeño productor, apoyar al movimiento cooperativo.
  14. Tenemos que asumir responsabilidad política y tomar las riendas de nuestro destino. Organizarnos para que el poder político pase a nuestras manos o conquistarlo, que la correlación de fuerzas y apoyo pasen de la colonia al pueblo, quienes nos dominan es una minoría que hasta ahora cuenta con el apoyo de los que somos una mayoría, así se conforma el bloque histórico colonial.  Hay que destruir esta hegemonía y construir un nuevo bloque histórico compuesto por las mayorías, teniendo como meta fortalecer un proceso anticolonial que nos lleve a la autodeterminación y a la independencia.
  15. María nos presenta la oportunidad de hacer una revolución en nuestras conciencias que nos guíen a transformar la realidad.  No creo que haya un puertorriqueño que esté satisfecho con la realidad que estamos viviendo, solo los que viven del sistema colonial y se enriquecen día a día, no quieren ningún cambio, favorecen el “statu quo”.

La realidad nos obliga a actuar y a organizarnos en el terreno político, económico, social, contra hegemónico (construir una nueva concepción de mundo colectiva) y defendernos como pueblo si somos atacados en el proceso hacia la liberación política, social y económica (construcción de una nueva articulación política basada en más poderes políticos).
​Necesitamos el apoyo de los pueblos libres del mundo, que pongan ojos en Puerto Rico. Apóyennos a liberarnos, no a seguir consumiendo sin control y aumentando la dependencia.
​Las cadenas coloniales se ven y las podemos tocar, si las podemos tocar, las podemos romper.

Héctor L. Nieves Reyes
25 de octubre de 2017

Revisado el 20 de septiembre del 2020

 

 

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