Nota: Publicado con el permiso del autor
Recuperado de Claridad y de Nueva Pensamiento Crítico
Autor: Carlos Román Espada
Especial para En Rojo
El 1 de marzo de 1954, los nacionalistas Irvin Flores, Andrés Figueroa Cordero, Rafael Cancel Miranda, dirigidos por Lolita Lebrón, realizan un ataque armado al Congreso de los Estados Unidos, específicamente atacan en el hemiciclo de la Cámara de Representantes. Como resultado directo del ataque el gobierno en Puerto Rico ordena el arresto del liderato tanto del Partido Nacionalista como del Partido Comunista.
Eugenio Cuevas Arbona recordaría los arrestos;
‘’A raíz del atentado contra el Congreso en marzo de 1954, el Gobierno de Puerto Rico, con el evidente propósito de halagar y complacer a Washington, ordenó el arresto de varios dirigentes comunistas, acusándolos de haber violado las leyes de la Mordaza. Los compañeros Juan Sáez Corales, Pablo García Rodríguez y Juan Santos Rivera evadieron los arrestos y se fueron a una especie de clandestinidad que se extendió por varias semanas hasta que fueron capturados en una casucha campesina cobijada de paja, destartalada y ruinosa, ubicada en algún lugar de la región del Toa …’’
La casucha campesina de la que comenta Cuevas Arbona era del trabajador cañero Demetrio Sánchez Álvarez, quien originalmente le dio albergue en su casa a Juan Sáez y a Pablo García, luego se sumó Juan Santos. A preguntas del fiscal sobre si Sánchez sabía que la policía estaba buscando a los dirigentes comunistas, esta contesta que sí, luego explica por qué los escondió de las autoridades; ‘’ Porque desde que los conozco los conozco como defensores de los trabajadores y como gente buena.’’
En cuanto a César Andreu, cuando la policía fue a la casa a buscarlo no lo encontró se llevaron a Jane Speed , pero Andreu la noche anterior no se había acostado escribiendo en un mirador que había detrás de su hogar. Además, cuando entraron a la casa la madre de Jane y Nicolas Andreu Spedd, hijo de ellos, le hicieron frente a la policía impidiendo un registro eficiente.
Durante unos días Andreu permaneció en el mirador escribiendo cartas en que denunciaba los arrestos. Luego de una semana, cuando entendió que había cumplido el propósito se entregó en el edificio del periódico El Imparcial.
Para abonar a la histeria, el Gobernador Luis Muñoz Marín, había dicho que los Partidos, nacionalista y comunistas estaban proscritos en Puerto Rico por ser movimientos subversivos. Por su parte un artículo de la prensa propone lo siguiente; ‘’Poniendo de manifiesto la firme disposición del Gobierno de Puerto Rico de acabar de una vez por todas con las actividades subversivas que además constituyen una amenaza para la paz y la tranquilidad del pueblo que afectan grandemente el prestigio de la isla, el coronel Salvador Roig anuncio el domingo por la tarde que se arrestara preventivamente a todos los que pertenezcan a organizaciones oficialmente calificadas de subversivas.’’
El Secretario de Justicia, José Trías Monje le indicó al gobernador que no contaban con evidencia que conectara a los comunistas con los nacionalistas para efectos de la acción militar que habían desarrollado. Además de que Trías Monge no confiaba en la evidencia o información de la policía, particularmente sobre los comunistas. Trías Monjes en sus memorias narra que a pesar de ello;
‘’El gobernador me pidió que le diera el beneficio de la duda, por el momento a la información que supliese la policía , aunque resultase en un alto número de arrestos; que después de aprobarse la constitución, como era mi conocimiento, se contaba con la salvaguarda de que la decisión sobre si procedía o no un arresto le correspondía a la judicatura, que aun después de lograrse la expedición de órdenes de arresto, el departamento examinase lo antes posible si la prueba era suficiente para seguir adelante.’’
Tenía razón Trías Monge para poner en duda la información suministrada por la policía, para probar que el liderato comunista estaba conectado con los sucesos en la Capital federal. Los fiscales tomaron al menos tres declaraciones juradas, una al ex dirigente comunista (expulsado del PCP en 1942), y luego confidente, Sergio Kuilan Báez y a dos policías , el sargento Víctor B. Rodríguez y el teniente Astol Calero Toledo, este último en la década del setenta llegaría a ser Superintendente de la Policía. Todos los testimonios a que hacemos referencia padecen de ser unos altamente prejuiciosos y sin evidencia constatable y aun menos que vincule a los comunistas con los nacionalistas e incluso con actos violentos. Por ejemplo, en Sargento Rodríguez, en respuesta a una pregunta del fiscal testifica entre otras cosas que;
‘’Presté atención especial a lo que dijo el Sr. Félix Ojeda porque una vez fue un poco violento en lo que dijo. Recuerdo claramente que se expresó en parte de la siguiente manera: Se refirió a ‘’este movimiento’’ sin ser más específico y dijo que este movimiento funciona en otros países fuera de Puerto Rico donde los trabajadores no tienen miedo de luchar por la vida de sus hijos que van a ser destrozados en los campos de batalla. Refiriéndose a los agentes de la policía allí presentes dijo que se proponía organizar un congreso, pero ese congreso se celebraría en un sitio privado donde los miembros de la policía no pudieran estar presentes y serian sacados de allí si lo intentaran de cualquier manera, costase lo que costase. Recuerdo que también dijo que a los ricos imperialistas americanos no les conviene la paz, que como estos tiene dinero pagan agentes muy gorditos, y cuando así decía señalaba hacia mí y otros agentes de la policía que estábamos presentes. Decía que, en la democracia, refiriéndose a ellos, tienen derecho a reunirse libremente sin la Gestapo detrás.’’
La declaración de Astol Calero Toledo quien, al momento de los arrestos, llevaba desde 1942 en vigilancia del PCP, será una plagada de prejuicios, veamos lo que dijo;
‘’El Partido Comunista Puertorriqueño predica y aconseja, al igual que el Partido Nacionalista de Puerto Rico, la conveniencia de destruir y derrocar el gobierno de Puerto Rico por medio de la fuerza y la violencia. Ahora bien, yo quiero explicar que las predicas de los líderes del Partido Comunista Puertorriqueño están disfrazadas muy hábilmente con aparentes manifestaciones y campañas pro paz mundial y en favor de los principios democráticos. En su fondo hay una predica encaminada a lograr la destrucción del gobierno mediante la revolución armada, para lo que cuentan con el ejercito llamado por ellos el proletariado. A este fin, tanto nacionalistas que predican abiertamente la revolución armada como los comunistas puertorriqueños que disfrazan su propaganda en esa forma, están íntimamente relacionados a tal extremo que líderes nacionalistas asisten a y participan en actos del Partido Comunista y líderes comunistas asisten a y participan en actos nacionalistas.’’
La policía insular no era la única interesada en los comunistas. Un documento del Negociado de Seguridad Interna informa que el 16 de marzo de 1954, el Capitán José Bajandas , del Servicio de Contra-inteligencia Militar visito la oficina del Negociado de Seguridad y ofreció posibles informante para fortalecer la investigación contra los comunistas.
El Secretario de Justicia declara que ante la falta de evidencia del vínculo entre nacionalistas y comunistas, no se ha ‘’comprobado adecuadamente la existencia de tal conexión’’, Sin embargo, en el comunicado del Secretario de Justicia indica que ‘’ Aquí como en otros países, el partido comunista intenta disfrazar su intención revolucionaria con lenguaje equivoco, simulando respetar, cuando su conveniencia se lo indica, las propias instituciones democráticas que tienen el propósito de destruir.’’
Trías Monje en vistas públicas de la Comisión de Derechos Civiles declaro, en referencia a los arrestos de 1954, que la relación ‘’entre la Policía y el Departamento de Justicia no era estrecha. La relación principal era una relación directa entre la oficina del Gobernador y la Superintendencia de la Policía’’. Sin embargo, en esta ocasión reconoce que la responsabilidad por estos arrestos sin evidencia recae sobre él y expresa que; ‘’toda la culpa recae sobre mis hombros. Yo no pido disculpas de ninguna naturaleza, ni estoy culpando a nadie. Yo tenía dos caminos, renunciar a mi puesto o proceder a examinar si era cierto o no era cierto y entonces a liberar esas personas.’’
¿Como podemos explicar los objetivos del gobierno al hacer los arrestos de los comunistas en marzo de 1954? En primer lugar es la evidente represión de las ideas alternas al funcionamiento del capital colonialista, además de buscar separar a los líderes que tienen algún vínculo social, en tercer lugar identificar los miembros , colaboradores y simpatizantes del PCP, sacar del gobierno a todo comunista o simpatizante de los comunistas, en fin la destrucción de las ideas , reputación , hogar y trabajo de los comunistas era parte de los objetivos establecidos tanto por el gobierno de Puerto Rico , como el federal.
La segunda explicación la narra Heriberto Marín quien estaba preso por la revolución del 50 en la penitenciaria estatal;
‘’Había una cacería en toda la isla. Se buscaba, aparte del liderato del Partido Nacionalista. a los lideres del Partido Comunista. Poco a poco los fueron arrestando y llevando al Presidio. Allí conocí a Juan Sáez Corales, don Pablo García Rodríguez y creo que, a César Andreu Iglesias, Se puso todo en vigor la Ley de la Mordaza, que había sido aprobada a instancias de Luis Muñoz Marín, gobernador entonces de la colonia. Muñoz había estado en Washington al otro día del tiroteo y, después de llorar y excusarse con el Presidente, prometió acabar con el movimiento independentista en Puerto Rico.’’
No bastarán los arrestos de marzo de 1954, el 27 de octubre del mismo año se producen once acusaciones contra miembros y dirigentes del PCP, se les radican cargos por violación a la Ley Smith. Se les fijan fianzas irrazonables de 28 mil a unos y de 25 mil a otros, posteriormente las fianzas serán reducidas a más de 12 mil dólares. Dado unas fianzas tan altas, algunos no pudieron ser fiados, lo que conllevo que unos estuvieran presos por varios meses. Nilita Vientos Gastón informa en una de sus columnas que ‘’ Los acusados de violar la Ley Federal Smith solicitaron del Colegio de Abogados de Puerto Rico , en diciembre de 1954, el nombramiento de defensores. Accediendo a la petición el Colegio designo a los colegiados Manuel Cruz Orta, Abraham Diaz González, José Barroco y Marcos A. Ramírez.’’ Luego de tres años de distintos trámites procesales el fiscal presento una moción pidiendo el retiro de los cargos. Los cargos estaban fundamentados únicamente con la mera participación de los acusados como militantes en el PCP “sin ninguna relación con actos de violencia’’, además sostenían que los propósitos del PCP son hacer la revolución por métodos violentos. Incluso el Director del FBI , Edgard Hoover expreso para la prensa que los arrestos fueron hechos en concordancia con ordenes emitidas , poco después de que los agentes federales radicaran acusaciones contra los arrestados “por predicar y abogar por el derrocamiento por la violencia del gobierno en violación a la Ley Smith’’.
El director del FBI declaro también a la prensa que ‘’ este golpe inutilizara la conspiración comunista en Puerto Rico, toda vez que las personas arrestadas han ocupado importantes posiciones en el Partido Comunista Puertorriqueño .’’La fijación de Hoover con la persecución a los comunistas lo llevara a escribir el libro, Masters of Deceit, the story of communism in America and how to fight it.
En todo este segundo proceso fue informado el Secretario de Justicia, José Trías Monge , por el fiscal federal, Rubén Rodríguez Antorgiorgi.
Todo este clima de persecución, anticomunista, desarrollado particularmente a raíz de la guerra fría tendría repercusiones muy seria sobre la influencia del PCP en el movimiento obrero, los cuadros políticos comunistas serian marginados de la organizaciones sindicales donde militaban.